Ansiedad, absurda ansiedad... Ese insomnio que aparece de la nada, específicamente cuando al día siguiente tenés que madrugar, aparece como a propósito con mil ocurrencias en mente. También en forma de preocupación, de lo que tenés que hacer, de lo que queda por hacer y hasta de lo que no podes hacer. La ansiedad, esa que te arrebata la tranquilidad, la que te hace un nudo en el estómago, que se te caiga el pelo por un estrés sin razón y hasta que te de angustia absoluta sin saber exactamente porque.
Siento que se agudiza más ahora en esta pandemia, cuando se suponía que tendría mas tiempo que antes; se juntan los quehaceres del hogar, se suman las tareas, ese curso online pendiente que querés hacer para "aprovechar el tiempo que no se puede salir"... Quiero tejer, quiero hacer una huerta, quiero estudiar, quiero enseñar, quiero trabajar, quiero hacer ejercicios, quiero dibujar, quiero mirar películas, quiero jugar, quiero dormir, quiero experimentar nuevas recetas de cocina, quiero, quiero, quiero. Pero no puedo.
Llega la noche y no duermo, aunque durante el día haya aguantado las terribles ganas de dormir. Aunque esté realmente cansada, no puedo... Enojarme no ayuda, pienso y medito, se carcome la conciencia saber que debería dormir porque mañana tengo mucho que hacer, me hace sentir culpable y me da nervios, aun así no duermo, no puedo dormir... Mi mente no me deja y odio este trastorno.
Maldita ansiedad, dejame vivir!